Seguidores

sábado, 29 de septiembre de 2012

Honey.

Tres días, uno detrás de otro con los ojos contenidos sin soportar el dolor de las mil heridas juntadas en una. Parecía que cada pezado de lágrima no derramada renacía para explotar de la peor manera, tener una sola manifestación de tristeza multiplicadas por mil balas desviadas. ¿Realmente estaba ocurriendo esto? es decir, me he obsesionado de una persona a la que antes detestaba y ya sea por casualidad o causalidad, mi mente solo tiene sitio para él. Todo lo que no está relacionado con él pasa poco a poco a un segundo plano, un vacío. No me puedo permitir servirme de ilusiones para que mi entorno cambie totalmente, para lo que puede ser solo un espejismo. Si exite un sexto sentido estaba seguro que el mío era la intuición y me estaba diciendo que si por algo no puedo parar de pensarlo es porque existe una mínima posibilidad de que le pueda gustar. He vivido en una nube más de curso y medio, se vive bien de ilusiones pero ¿y si ese cuento no es tan falso como yo creo? tal vez la obsesión tan grande que tengo se deba porque algo debe de pasar, al menos el intento. No me voy a quedar de brazos cruzados viendo como este curso pasa volando y yo suspirando por algo que nunca me atreví a probar bocado. Al igual que nos conocimos de una forma tan aleatoria nuestros caminos se han dividido, pero no por ello voy a dejar de luchar, y menos por una persona como él. Me niego, me niego a que en un futuro no muy lejano mi vida se base en secarme la miel de los ojos.

2 comentarios:

  1. Precioso..me gusta como te expresas, te dejo mi blog por si quieres pasarte:)
    http://verdadescontadasymentirasinqueriendo.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar